Una plaga que produce un parche que agota el oxígeno en el Golfo de México se forma cada primavera y alcanza su clímax en el verano. Las “zonas mortales” se generan alrededor del mundo, desde la Bahía de Chesapeake hasta el Mar Báltico. ¿El culpable principal? Los residuos agrícolas. En este caso, el fertilizante que fluye desde río arriba por el Misisipi hasta el Golfo, donde suscita el florecimiento de algas. Cuando las algas mueren (o son devoradas y defecadas por el zooplancton), se descomponen en el fondo, mermando el oxígeno, sofocando a la vida y dañando los modos de vida. Clint Guidry, pescador camaronero de Luisiana, dice: “La gente no se puede imaginar la cantidad de vida marina a la que esto mata”. La zona mortal del año pasado fue la tercera mayor desde que se les empezó a dar seguimiento en los ochenta. Pero la de 2008 podría superar las marcas: la presión para generar etanol incide en que los agricultores siembren más maíz, un cultivo que suele recibir una gran cantidad de fertilizantes.
Escrito por: Chris Carroll el 30 de Mayo de 2008 para http://www.lanasa.net/