Prohibido apagar el celular

En la mayoría de las escuelas de mi bella Colombia, se prohíbe el uso de celular en clases y estuve de acuerdo hasta hace poco que participé en una capacitación de Mobile Learning: Uso educativo de dispositivos móviles. En la que reconocimos con un grupo de colegas, el potencial que nos brinda el celular, más allá de llamar y hablar por el BBChat.

Las prohibiciones o reglas en las escuelas, con respecto a dispositivos móviles, sin duda, convocan a la disciplina y respeto al aula de clases.  Pero ¿Qué tan efectivo es apagar el celular? si este se ha convertido en lugares como África del Sur, en una herramienta educativa, donde los estudiantes reciben información, el profesor genera contenidos, hace las clases más lúdicas y de esta manera enriquece los procesos de enseñanza-aprendizaje.

Mobile Learning, hace parte de la revolución educativa, de la inclusión de herramientas tecnológicas en el aula y evidencia la necesidad que han tenido los maestros de hacer más divertidas y llamativas las clases, y de esta manera, captar la atención de los estudiantes.

El aprendizaje a través de dispositivos móviles es una de las tantas alternativas que tiene un docente para dar sus clases. Y a esta oportunidad, no faltarán maestros que duden de su capacidad de manejar una clase por mensajes de texto, geolocalización o vídeos,  argumentando que maniobrar los dispositivos móviles de nueva generación se ha convertido en una tarea difícil.

Pero para llegar a aplicar este tipo de tecnologías en la educación en nuestro país, más que capacitación, más que deseos de aprender por parte de los docentes, se necesitan aliados, en especial a las empresas de telefonía móvil en el país,  que ofrezcan servicios especiales de paquetes de datos, aminoren costos y contribuyan realmente a la sociedad educativa, asumiendo realmente un compromiso social.

M-learning nos brinda a los docentes ubicuidad e inclusión. Su aplicación e implementación puede darse en zonas rurales o urbanas, y no existe un modelo o metodología única de apropiación, a mi parecer depende, de que tan creativo o innovador puede ser un docente para aplicar en sus clases el uso de dispositivos móviles.

Un ejemplo de lo anteriormente mencionado, se presenta en un colegio distrital, ubicado en la localidad de Bosa en Bogotá, donde tuve la oportunidad de conocer a una docente que capturaba las fotos de sus estudiantes en los momentos en que más rebeldes y desobedientes estaban, con la intención de que el estudiante creará con esas imágenes, un vídeo en Windows Movie Maker, reflejando su vida escolar, sus actuaciones y exteriorizará el por qué de esas actuaciones y como llegaría a mejorar su comportamiento en la escuela.

Esta iniciativa es maravillosa y me demuestra que existen maestros que aunque no sean los expertos, no temen a innovar y acercarse a sus estudiantes a través de metodologías sencillas y que logren apropiarse de las TIC.

Es difícil ser optimistas ante la implementación exitosa en nuestro país de este tipo de tecnologías en la educación, pero a reflexión, cito lo siguiente. “En sólo diez años, se pasó de 2.3 millones de líneas móviles a 43.4 millones a finales de septiembre de 2.010”.

Link de referencia:

http://www.colombiadigital.net/columnistas/rafael-orduz/item/564-2000-%E2%80%93-2010-10-a%C3%B1os-de-revoluci%C3%B3n-en-telecomunicaciones-en-colombia-1.html

Imagen tomada de Getty Images.

María Luisa Caicedo

Asesora educativa

Corporación Colombia Digital

maria.fr@colombiadigital.net

www.colombiadigital.net

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