¿Veto a las crispetas en cine alternativo?

Soy un asistente asiduo a los ciclos de contenido alternativo que ofrecen algunas salas de cine en el país. Valoro el esfuerzo por traer, ópera, ballet, broadway, conciertos, documentales, películas clásicas y teatro de alta calidad, pero por favor, no es la obra en sí, es una reproducción en video.

Esto a raíz de un momento incómodo que pasé al no poder ingresar en primera instancia a una de las salas de cine para la proyección de la obra de teatro Todo Sobre Eve, del National Theater Live de Londres la cual pasaban un domingo a medio día; todo porque había comprado un balde de crispetas.

Gillian Anderson y Lily James protagonizan Todo sobre Eve

¿Por cuál razón no podía entrar el inofensivo alimento? pregunté, la joven me contestó que porque iba a entrar a ver una obra de teatro y que eso incomodaba. Le dije que eso lo entendía si fuera a una sala donde los actores estuvieran en tarima en vivo, pero que esto era una sala de cine y lo que iban a pasar era un video de una obra de teatro.

El incidente no pasó a mayores pues al hacer ella la consulta a algún superior a través de su intercomunicador nos permitieron seguir, así como al resto de parejas y familias quienes ya habían comprado los pasabocas.

Es un hecho molesto y distractor si tenemos en cuenta que deberíamos estar hablando de la tremenda adaptación teatral dirigida por Ivo Van Hove, de la delicada actuación de Gillian Anderson (Archivos secretos X) en el papel de Margo Channing y no de un balde de crispetas. Sin embargo, es una situación que ya he visto y vivido en otras oportunidades, la cual pienso tiene una alta carga de snobismo.

Lily James como Eve

Los ciclos alternativos hay que aprovecharlos por las valiosas opciones que nos ofrecen, resaltamos su labor en el proceso de formación de públicos y entendemos el riesgo de las empresas de proyección por programar contenidos que no necesariamente son masivos, pero sí muy bien comentados.

Todo eso está bien, si no se olvida que estamos yendo a una sala de cine y la proyección es en video. Exigir etiqueta un domingo en la mañana para entrar a una transmisión de ópera es algo fuera de proporciones. Cosa distinta si usted quiere hacerlo y le parece que dignifica el momento.

El cobro exagerado de los tiquetes también hace parte de ese mal entendido concepto de alta cultura. El jazz, el tango, la ópera, el broadway, el teatro en general vienen de lugares sencillos y populares ¿cómo se pretende hacer formación de públicos si el acceso a estos contenidos son el triple de una entrada normal a cualquier película mediocre?

Olivier Theatre de Londres

Es la pretensión de estar ofreciendo una cosa cuando en realidad dan otra, aparentar que es teatro cuando es un video de una obra de teatro. En el caso de Todo sobre Eve, vimos la presentación en vivo del National Theatre grabada hace dos años, en donde incluso sale por momentos el público presente y escuchamos cuando los asistentes sonríen, aplauden y lloran.

La falsa sensación de estar allí presentes en el Olivier Theatre es agradable y a veces también contagiosa, cuando los que sí están allá silban o cuchichean, luego nos damos cuenta que no estamos en el teatro de Londres sino en un centro comercial de Bucaramanga Colombia y que todos asistimos de manera virtual al show, lo cual es bien diferente.

Más curioso aún porque esta obra con la que inició el ciclo en el 2019 es una mirada tras bambalinas a la extraña relación entre una joven actriz Eve y la diva de varias décadas Margo Channing : es decir, estábamos en cine viendo una obra teatro que trata sobre el teatro.

Todo sobre Eve está basada en un hecho real escrito para una revista y luego adaptado al cine con la actuación de Bette Davis como Margo Channing

En otro momento comentaremos acerca del sorprendente guion, las polifacéticas interpretaciones, el uso de video en la puesta en escena, entre otras virtudes de All about Eve, porque la situación, como se dieron cuenta, me distrajo.

Lo bueno es que nos quedan tremendos títulos como: Todos eran mis hijos, del dramaturgo Arthur Miller, Antonio y Cleopatra, protagonizada por Ralph Fiennes ( El paciente inglés), The Lehman trilogy, dirigida por el cineasta Sam Mendes (Belleza americana), Ricardo II, de William Shakespeare y La Audiencia, imperdible esta última con Helen Mirren en el papel de la Reina Isabel.

Sólo espero no volver a sentirme mal cuando vaya a alguna de ellas, un domingo por la mañana, en jean, camiseta, con mi perro caliente, crispetas y que no me dejen entrar porque supuestamente voy a teatro… por favor

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