El extraño ritual con hormigas culonas de los adinerados en Santander

No son masones, pero se asemeja a una sociedad iniciática.

Por lo general, para lograr entrar en sociedades herméticas, es necesaria la recomendación por alguno de sus miembros, lo cual se conoce como cooptación. Sin embargo y por casualidades de la vida, existen casos donde algunas personas logran ingresar porque fueron sorprendidos espiando o presenciaron por accidente algún ritual. Escuché lo siguiente en un café de la Cra. 33 justo antes de empezar la cuarentena.

Las piedras negras de Ábrego

Estos dos hombres comenzaron a hablar de las piedras negras de Ábrego, que aparte de ser un municipio cerca a Ocaña, también es el nombre de un viento de España relativamente húmedo y portador de lluvias. Es ahí, en un terreno de aproximadamente 3 hectáreas, donde se encuentran convenientemente dispersos unos fragmentos monumentales de meteorito que fueron usados por los indios Orokes para sus rituales reproductivos durante la luna llena, esto según la tradición oral.

En el vaivén de la conversación sobre las prácticas religiosas de los caciques en esas rocas, sin advertencia, profundizan rápidamente en el tema mencionando un ritual junto a la Piedra del Sol y resalta una palabra muy extraña para mí: Copricó. Seguí prestando atención mientras pedía al barista un doppio y un lapicero, ya que la batería de mi celular estaba muriendo.

Lo que escuché sobre el Copricó me dejó aterrado:

Es un ritual de limpieza que ocurre generalmente después de la muerte del esposo miembro de la organización: la viuda debe ser despojada de las impurezas de la vida que llevaba hasta ahora, por lo cual debe tener relaciones con un grupo de 7 miembros varones. Aquellas que se nieguen, perderán todas las posesiones materiales dejadas por el esposo y estas pasarán a ser parte de la organización. Durante el ritual, la viuda debe comer Attas para asegurar fertilidad y abundancia en la nueva vida que le espera. Después del rito estas mujeres quedan libres para encontrar un nuevo esposo adinerado por fuera de la organización ya que practican la exogamia.

Los sujetos pagaron la cuenta y se perdieron del mapa en un Camaro cuyas placas no alcancé a ver. Claramente quedé con la curiosidad picada y mi ansiedad por saber más crecía conforme la batería de mi celular se agotaba.

En cuanto pude, comencé a buscar desesperadamente en Google esas palabras clave que logré anotar en una servilleta, resultando para mi sorpresa que se relacionan con las hormigas culonas cosechadas por estas fechas.

El vuelo nupcial

Copricó resultó ser el nombre que daban los Guanes a la comida nupcial que comprendía de hormigas culonas de la especie Atta laevigata; este era el regalo predilecto para el «Chol» (luna de miel en Guane), pues tenían la firme creencia de que alimentándose con hormigas mientras consumaban el matrimonio, sus hijos saldrían muy fuertes y vigorosos.

También encontré que la copulación entre estas hormigas es bien peculiar: al salir del hormiguero, las culonas emprenden un vuelo en espiral por los aires donde pueden alcanzar hasta los 200 metros de altura; durante esta ascensión las hembras se unen con muchos machos que depositan su material genético en ellas (una especie de bukkake real ya que los machos nunca las tocan), para esto cuentan con una espermateca que les permite acumular las semillas de todos los machos con los que copulan, los cuales pueden ser hasta siete. Los machos caen muertos al final de esta danza.

Sin duda, las hormigas para los Guanes eran importantísimas, de este regalo dependía el éxito de las uniones sentimentales en su sociedad. Cuando las hormigas salían a reproducirse, los Guanes se las comían.

Surgen más preguntas que respuestas

Según la escritora florideña Rosa Elmira Castro, los Guanes preservaron sus conocimientos de astronomía en diferentes rocas de su territorio, ella también plantea la hipótesis de que los indígenas Guanes tienen un origen extraterrestre, el cual se remonta a varios miles de años.

¿En qué momento y con qué fines se creó esta extraña organización? ¿Cuál es su nombre? ¿Harán estos rituales en Ábrego o tendrán un templo en Bucaramanga? ¿Serán descendientes de los Guanes? ¿Cuántas personas son? ¿Mezclan los rituales de los Guanes con los de los Orokes? ¿En qué momento la afición por comer hormigas culonas fue más allá?

No creo tener la suerte para volver a escuchar una conversación de estas, sin embargo espero les haya entretenido esta historia totalmente ficticia e ideada durante mis baños de sol en la terraza de la casa, ya que no puedo salir a caminar por la 33. Es una forma ocurrente de celebrar la semana de la santandereanidad, conocer algo de historia regional y por supuesto, de incitarles a comprar hormigas culonas una vez se termine la cuarentena, los campesinos santandereanos necesitan de todo su apoyo, mano. #SantandereanidadEs

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