No es precisamente la nariz de Woody Allen la que quiero comparar con la del exdiputado del Valle Sigifredo López, sindicado por la Fiscalía General de la Nación de ser coautor del secuestro de sus compañeros, sino con la del dictador en la comedia futurista The Sleeper, El Dormilón de 1973, cuyo guión, dirección y protagonismo son del prolífico cineasta neoyorkino.
En la película, Miles Monroe, interpretado por Woody, es despertado 200 años después de haber sido congelado, por culpa de una operación quirúrgica fallida en los años 70. Además de su molestia por lo sucedido y las situaciones absurdamente cómicas derivadas de ello, Miles encuentra un mundo sobreviviente de una hecatombe nuclear, robotizado, con poco contacto humano y controlado por un dictador.
Diane Keaton y Woody Allen en The Sleeper
Resulta que a ese dictador, los miembros de la resistencia le hicieron un atentado, haciéndolo volar en pedacitos y sus copartidarios solo pudieron rescatar la ¡nariz!. Esa parte del cuerpo se convertirá en la pieza clave para reconstruirlo totalmente a través de una técnica avanzada de clonación, en la que por supuesto intervendrán torpemente nuestro visitante del pasado y su compañera de aventura interpretada por Diane Keaton.
Woody Allen, Diane Keaton y la nariz del dictador, The Sleeper
Para los que no se han enterado, les cuento que en un video incautado a la organización insurgente FARC en Colombia, se escucha a un hombre dando indicaciones para el secuestro de los diputados del Valledel Cauca y en un momento aparece la nariz de quien habla. El Fiscal toma esa ´caprichosa´ nariz y en un acto de ´clonación a la criolla´, intenta reconstruir, a partir de ella, el cuerpo de quien planea el atentado, que según su parecer es nada menos que ¡Sigifredo!.Sin ir tan lejos, en el 2012, el Fiscal Luis Eduardo Montealegre nos sorprendió a los colombianos, con la captura de Sigifredo López, el único de los diputados del Valle que se salvó de morir en el secuestro masivo que hicieran las autodenominadas Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia,, en el año 2002.
La situación es trágica: si es culpable sería el engaño más terrible que hayamos presenciado en mucho tiempo, pues el ahora sindicado estuvo secuestrado 7 años y sus 11 compañeros fueron asesinados en cautiverio y si no lo es, sería una torpeza del nuevo Fiscal quien puso a dormir ´en una cámara del tiempo´ varios procesos de parapolítica que venía investigando su antecesora Vivian Morales, para dedicarse a ´clonar´ la ´ñata´ del video.
Los medios de comunicación también intervinieron en la original clonación colombiana, RCN Televisión pasó en exclusiva el famoso video comparando el perfil con una foto de Sigifredo López, luego midieron la curva aguileña que podría ser la del diputado, pero también la de un par de millones de compatriotas… bueno eso hace parte del show.
Lo que no estaba en los libretos era que Darío Arizmendi de Caracol radio contara que un miembro de la fiscalía ofreció el video a los medios de comunicación por una suma de dinero, con la negativa de esa emisora.
Al parecer RCN TV si aceptó y pagó 50 millones de pesos para obtenerlo. El director del consultorio ético de la Fundación Nuevo Periodismo Latinoamericano Javier Darío Restrepo dijo al respecto que “el buen periodismo no admite el dinero, ni como instrumento ni como presión”.
En la visión futurista de Woody Allen vemos que en la televisión sale lo que quiere el gran Jefe, incluso en un programa el dictador mira al horizonte voltea hacia la cámara y manda a dormir a sus súbditos diciendo adiós con la mano y los televidentes se despiden de él con el mismo movimiento de mano.
Las primeras películas de Woody Allen se caracterizan por la comedia física y por la sátira social
En otra escena un científico que intenta descubrir el uso de ciertos elementos del pasado le pregunta a Miles, ¿para qué servía esto? y le muestra un noticiero de TV, Miles levanta las cejas y demora la respuesta a lo que el científico se adelanta y dice: creemos que se lo ponían como castigo a ciertos ciudadanos y Miles mira a la cámara y dice: si, si, usted tiene razón.
Por lo pronto, la nariz sospechosa del video sigue congelada, pues un par de guerrilleros presos dijeron que pertenece a alias ´J. J.´ el mismo que comandó el operativo del secuestro, pero como el hombre fue dado de baja en el 2007 no hay como confirmarlo, así que me quedo con la imagen de Woody y Diane en la sala de cirugía poniendo la nariz en la mesa de clonación, ubicando la corbata, los guantes y los zapatos para cuando, por arte de la ciencia, fuera apareciendo el malo de la película.
El Dormilón, Woody Allen 1973
Mario Mantilla Barajas
Comunicador Social – Realizador Audiovisual
mariomantilla88.blogspot.com / twitter: @mareoman88
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