James Bond, el agente 007, enfundado en su elegante traje negro, llega al palacio de Buckingham para escoltar a la reina Isabel II de Inglaterra hacia el estadio Olímpico de Londres, donde se dará inicio, en contados minutos, a la ceremonia de inauguración de las trigésimas olimpiadas. Se saludan protocolariamente y se suben al helicóptero …