CIUDAD…, COMPETITIVA Y GLOBAL

Con los cacareados y trillados apelativos a Bucaramanga como ciudad.., que a manera de prefijo a los calificativos de “competitiva y global” que dependiendo del estado anímico y su entorno pronuncia en cuanto escenario ocupe nuestro acreditado como el “segundo mejor alcalde”, (posiblemente en encuesta realizada en reunión de consejo de gobierno y a puerta cerrada slogan que nadie hasta hoy después de 4 años aún comprende, pues en la cotidianidad otra es la imagen que propios y extraños captamos.
Será que en sus muy internacionalizadas experiencias no habrá visto y comparado en aras de encontrar oportunidades para mejorar situaciones que un viajero al confrontarlas con lo que se acostumbra en esta capital universitaria, ciudad región y ejemplo de ciudad auto sostenible a los ojos de la humanidad y próxima a ser calificada por la ONU como patrimonio industrial del universo. Ojalá esta apreciación ligera no se apodere de la jerga del mandatario, que ni en la misma sesión a puerta cerrada generaría credibilidad entre sus incondicionales áulicos, sin expresar una irónica sonrisa ante semejante consideración.
Basta con utilizar el llamado Palonegro International Airport, único en el mundo en el cual se protege haciendo uso indebido de las autoridades policivas un negocio particular exótico en nuestro medio un PARQUEADERO para, deducción a la que nos dirige el hecho de no permitirse una parada menor a 35 segundos cronometrados desde el momento de apearse y bajar sus maletas de un baúl de un vehículo particular o uno público (siempre y cuando no lleve tanque de gas), o en recoger a la salida de la entrega de equipajes a quien llega a una ciudad con todos los miles de calificativos y centro turístico en donde espera visitar a la gorda y en un futuro no muy lejano el cablecapricho donde podrá degustar un pincho con acompañamiento de mazorca, boje y sebiche de hormigas culonas. Obligando al visitante que después de invertir casi medio millón de pesos llega al “paraíso” que le ha dibujado un entusiasta y expresivo en gesticulación y palabras burgomaestre, a caminar entre rampas y sacándole el quite a automotores que transitan afanados por la rampas de acceso y salida del aeropuerto para evitar una multa que nuestros diligentes autoridades tratan de imponerles obligándolos a aparcar en el único parqueadero de esta ciudad región en el aeropuerto.
Que nos enumere nuestro recorrido y siempre viajero alcalde cuantos aeropuertos de categoría en ciudades de Colombia o el exterior tienen la misma conducta hacia sus visitantes ya sea a ruedas de negocios o deseosos de comprar todas las maravillas que él cree podemos ofrecer como los mejores exponentes en cada renglón. No se trata con nuestra airada crudeza y crítica el ser pesimistas con nuestra ciudad, sino es el deseo de mejorarla para no recibir permanentes críticas de quienes nos visitan o de los mismos residentes en abierta contradicción con el discurso adulador que nos toca oír en espacios pagos de nuestros medios locales (dígase TRO).

Comentarios

comentarios

Powered by Facebook Comments